Que un estudioso como Giovanni Sinicropi, que no era hispanista, se fijara en las Soledades fue una suerte para Góngora y el gongorismo. Publicado originalmente en 1976, su Ensayo, por una serie de cuestiones editoriales ajenas al valor de la obra, apenas tuvo difusión fuera de los círculos de especialistas, aunque suponía una gran aportación en unos años que fueron cruciales para la recepción internacional del autor cordobés, cumbre del Barroco en cualquier lengua. La traducción que presentamos, precedida de un prólogo de José María Micó, reconocido experto en la materia, tiene el doble valor de hacer justicia a la contribución de un gran filólogo y de recuperar para los lectores en español una obra casi desconocida, de la que sobreviven importantes propuestas y un conjunto de aportaciones audaces y coherentes. Tras un capítulo inicial que nos sitúa en el contexto histórico y retórico que rodeó a los poemas mayores de Góngora y describe «la polémica literaria más virulenta que haya conocido España», el Ensayo se adentra en un estudio detenido, de base semántica y estructural, de las muchas capas y significados que encierra el texto de las Soledades. Desde que apareció el trabajo de Sinicropi, hace casi medio siglo, los estudios gongorinos han dado frutos espléndidos en diversos países (entre los que, por cierto, siempre ha destacado Italia) y algunos de esos avances tienen en estas luminosas páginas un indudable primer impulso. Lo afirma el propio Micó: cuando la agudeza, el rigor, la capacidad analítica y la sensibilidad crítica se juntan en una sola persona (como, sin ir más lejos, sucedió con don Luis, ejemplo de talento, memoria y técnica) el resultado puede ser este fundamental Ensayo sobre las Soledades' de Góngora, por fin accesible en España.