En la cuarta y última entrega de la saga «Las 4 virtudes estoicas», Ryan Holiday autor superventas y referente del estoicismo moderno defiende la virtud de la Sabiduría en un mundo apresurado. De todas las virtudes, la sabiduría es la más esquiva. Esto se hace especialmente evidente en una época en la que se recompensa la reacción y la charla trivial, frente a la contención y la reflexión. Para Ryan Holiday, la sabiduría es el principio rector de su vida y La sabiduría es la recompensa es la culminación de toda su obra. Basándose en historias fascinantes de figuras tanto antiguas como modernas, Holiday muestra cómo cultivar la sabiduría a través de la lectura, el estudio y la experiencia. A través de las vidas de Montaigne, Séneca, Joan Didion, Abraham Lincoln y otros, Holiday nos enseña a escuchar más de lo que hablamos, a pensar con matices, a cuestionar sin piedad nuestras propias creencias y a desarrollar un método de aprendizaje que podamos perfeccionar durante una vida entera. Argumenta con contundencia sobre la necesidad del esfuerzo mental y advierte contra los atajos que nos privan del conocimiento