Hay en los relatos de María del Carril una mirada alejada de toda piedad y un humor sutil y descarado.Hay en los relatos de María del Carril una mirada alejada de toda piedad y un humor sutil y descarado. Como quien nos saca a pasear a lo más íntimo de sus confidencias, nos acerca un collage de imágenes de todos los días, modificadas por una original agudeza.