FELIU TORRUELLA, MARIA / HERNÁNDEZ CARDONA, F. XAVIER
El conocimiento de las convenciones temporales es esencial para concebir el tiempo · El dominio de las unidades y medidas del tiempo es indispensable para avanzar en la comprensión del tiempo histórico: Medir el tiempo y el tiempo histórico · Cualquier dinámica de enseñanza-aprendizaje de la historia exige trabajar a partir de las fuentes del pasado · Las fuentes primarias son idóneas para fundamentar la enseñanza-aprendizaje de la historia en una perspectiva científica · Las fuentes secundarias nos ofrecen información sintética y elaborada sobre el pasado · El trabajo sobre el patrimonio nos conecta con el pasado y permite la observación objetiva y el desarrollo de métodos de análisis histórico · El conocimiento científico del pasado debe basarse en la utilización de fuentes sometidas a un juicio crítico · La causalidad histórica es uno de los conceptos estructurantes de la historia · La empatía histórica es necesaria para entender los límites y condicionamientos de personas de otro tiempo · La simulación y los juegos de simulación son útiles para vivir y comprender el pasado · Los saberes de la historia deben socializarse a partir de técnicas de comunicación, didáctica y difusión · La historia es el conocimiento científico del pasado La historia es el conocimiento científico del pasado.
Pretende potenciar un saber instrumental que permita superar las visiones ideologistas y doctrinarias que a menudo, es decir casi siempre, han tipificado la presencia de la historia en las aulas. Frente a la historia adoctrinadora basada en relatos no demostrados que sólo puede afrontarse, por parte de los alumnos, sobre la base de la memorización acrítica, los autores presentan una propuesta sin complejos que pone el énfasis en la enseñanza del método. De manera sistemática se plantea la importancia del concepto tiempo y su medición y posteriormente se plantea una didáctica de conocimiento del pasado basada en la interpretación y juicio crítico a las fuentes. Nada mejor que el método científico para estimular actitudes críticas fundamentadas en la razón.